Tras haber visto Inside Out (traducida chapuceramente al español como Del Revés), me veo en la obligación como amante del cine y seguidor de Pixar, de reseñar esta película. Pero semejante obra no se merece un pequeño párrafo de opinión en una esquina, Inside Out merece un análisis exhaustivo en profundidad. Me dispongo, junto con la ayuda de una buena amiga psicóloga y experta en emociones, a diseccionar la película de principio a fin. Lo cual quiere decir que este artículo va a estar lleno de spoilers. Te recomiendo que veas la película antes de seguir leyendo.
Antes de nada, hagamos un muy breve repaso de lo que nos ha dado Pixar, la compañía responsable de la película, a lo largo de los años.
Pixar en el tiempo
Pixar saltó a la fama con la maravillosa Toy Story en 1995, todo un hito del cine de animación. Tres años después nos volvieron a sorprender con A Bug’s Life, otra película maravillosa. Y tan solo un año después, volvimos a ver en la gran pantalla a nuestros juguetes favoritos en Toy Story 2. En aquel entonces, Pixar ya era más que conocida; sus películas habían cautivado a medio mundo.
En 2003, Finding Nemo (Buscando a Nemo) daría inicio a lo que se conocería como la época dorada de Pixar. Películas maravillosas, una tras otra. Auténticas joyas de la animación: Finding Nemo, Ratatouille, WALL-E, Toy Story 3 y Up. Películas que elevaron a la compañía a lo más alto del podio, consagrándola como una de las mejores del mundo.
Pero todo lo que sube, baja. Y en 2011 se estrenó la que, para mi gusto, no solo fue la peor película de Pixar, sino de las peores películas de animación que he visto en mi vida: Cars 2. Y ojo, la primera, Cars, me encantó. Me gustó muchísimo. Pero su secuela, con la ausencia de Paul Newman para doblar a uno de los mejores personajes y ese patético esfuerzo de rascar unas risas del estúpido personaje de Mate, hicieron del film un auténtico fracaso.
Pero ahí no terminó el bache de Pixar. En 2012 se estreno Brave. Una película que prometía mucho, pero que a nivel de guión dejaba mucho que desear; aburrida y predecible. Y ya, para rematar la faena, en 2013 estrenaron Monsters University. Casi tan mala como Cars 2. Una película que no parece ni de Pixar de lo pésima que es en numerosos aspectos. Llegados a este punto, mi confianza en Pixar se había desvanecido; sus tres últimas películas fueron un desastre total y no tenía pinta de que fuesen a levantar cabeza.
Y de pronto, nos presentaron su nuevo proyecto: Inside Out. Vi el tráiler, y me pareció una idea fascinante. Me ilusioné y esperé pacientemente a verla en el cine. A pesar de los últimos fracasos de la compañía, fui con las expectativas altas. Todo lo que había leído sobre Inside Out sonaba genial, y no esperaba ver menos.
¿Que qué opino de Inside Out? Para mi gusto, Inside Out es lo mejor que ha hecho Pixar, junto con Buscando a Nemo y WALL-E. Un chute de majestuosidad que no te esperas ni poniendo las expectativas sobre las nubes.
Las emociones cobran vida
La película nos introduce en la mente de una niña, Riley, y nos muestra sus cinco emociones básicas personificadas: Alegría, Tristeza, Asco, Miedo e Ira.
En realidad, las emociones básicas según la psicología son seis: alegría, tristeza, miedo, asco, ira y sorpresa. Sin embargo la sorpresa no la han añadido en la película. Paul Ekman, archiconocido psicólogo en el tema de las emociones y asesor de Inside Out, explicó por qué no está “sorpresa” en el elenco de personajes. Según él, “sorpresa” es una emoción muy corta, ya que aparece puntualmente para dejar paso a las demás emociones (tristeza, alegría, miedo, asco e ira) La sorpresa sirve para orientar la atención, en cuanto la atención está puesta en el estímulo, la sorpresa deja paso a las demás emociones, por lo tanto es normal que hayan prescindido de ella.
El argumento
Riley Anderson es una niña de 11 años que vive felizmente con su familia y amigos en Minnesota. Hasta que un día, por motivos que no quedan del todo claros (relacionado con el trabajo del padre, a mi parecer), la familia se ve obligada a mudarse a San Francisco, a un hogar más acorde a su nivel de vida. Este cambio tan brusco sobre una niña tan joven tiene unos efectos demoledores. No consigue integrarse en su nuevo colegio, no se acostumbra a su nueva casa ni a San Francisco, y es incapaz de disfrutar con aquello que antes la hacía feliz.
Entretanto, en su interior, Alegría y Tristeza se quedan fuera del control central (la parte del cerebro que controla las emociones de Riley). La película transcurre con ambas emociones, perdidas en la inmensidad de la mente de la niña, buscando la forma de volver y retomar el control y las riendas de su vida. Todo esto escenificado de una manera brillante, que sólo Pixar sería capaz de conseguir.
Hay muy pocas películas a las que se pueda aplicar literalmente eso de que «gusta a todos los públicos». Inside Out es el ejemplo perfecto. Es una película que divierte y entretiene a los más pequeños con sus luces, colores y momentos divertidos, al mismo tiempo que cautiva a los más emotivos y desafía a los más inteligentes.
Cuando las emociones cobran vida
Toda la información sobre el análisis ha sido en colaboración con Ana Vico de Be Fullness, Psicóloga y Coach, experta en emociones. Casi todo el trabajo es suyo, gracias a su vasto conocimiento y experiencia en referencia a las emociones. A continuación, se explica la función de cada emoción, atribuyéndola a la misma un papel activo, tanto en la mente de personas como de animales.
Alegría
Se encarga de mantener siempre una sonrisa ante cualquier adversidad, de celebrar los éxitos, de que seamos optimistas y estemos de buen humor. La alegría es la responsable de que repitas ciertas conductas que para ti han sido positivas.
Asco
Se encarga de que nos preocupemos por la higiene, de ir bien vestidos, de no comer ni beber algo en mal estado, de no ir por sitios sucios o malolientes donde podamos coger alguna enfermedad. Influye en nuestro gusto en general, desde cuál es nuestra comida favorita, hasta si preferimos cuadrados o rayas en las camisas.
Miedo
Se encarga de la supervivencia, así de simple y complejo al mismo tiempo. Encontrar el límite entre ser cobarde y temerario. Pues el miedo actúa tanto ante un peligro real como ante uno imaginario. Si no sintiéramos miedo no sobreviviríamos. Pero si sentimos demasiado miedo, no vivimos.
Ira
Encargada de defender nuestra propiedad y a nuestros seres queridos. La ira entra en escena cuando vulneran nuestros límites, cuando “nos sacan de nuestras casillas”. También es el responsable de actuar cuando algo es injusto. En definitiva, es el defensor de la integridad y la coherencia personal.
Tristeza
En el caso de Riley, es la emoción marginada por las demás. Sienten que no es útil y que no hace más que empeorar las cosas. Sin embargo, la tristeza es de las emociones más importantes y es un pilar fundamental en el crecimiento personal. La tristeza se encarga del recogimiento y de dedicarnos tiempo a nosotros mismos, de pensar y meditar en los cambios para cerrar etapas. Esto no se ve hasta el final de la película y tiene su explicación. La tristeza es la emoción necesaria para reintegrarnos como personas después de habernos “hecho trizas” por cualquier causa: una ruptura, un despido, una pérdida, etcétera.
Lo que nos define
Inside Out muestra de un modo metafórico y sublime lo que ocurre en nuestra mente en una etapa tan delicada como es la niñez. Cómo se forma la personalidad y cómo los recuerdos determinan todo lo que somos. Conceptos abstractos que Pixar ha sabido representar a través de metáforas brillantes.
Los recuerdos
Los recuerdos son mostrados en la película como esferas luminosas de un determinado color dependiendo de la emoción que haya forjado ese recuerdo. Esto es un detalle fantástico de la película ya que de hecho las emociones tienen un papel fundamental en la creación de recuerdos. Cuanto más intensa es la emoción, más potente es el recuerdo. En la película existen los llamados recuerdos esenciales que son más importantes que el resto de recuerdos, y se forman cuando la impronta emocional es más fuerte. ¿Qué recuerdos conservas de tu infancia? ¿Qué recuerdos importantes tienes de tu adolescencia? Seguro que recuerdas aquellos momentos donde tus emociones eran más fuertes. Eso es un recuerdo esencial.
La personalidad
En la película, los recuerdos esenciales forman lo que llaman las islas de la personalidad. Me pareció una representación gráfica ideal de la complejidad de nuestra mente.
Un recuerdo lo suficientemente potente puede forjar un antes y un después en nuestra vida y pasar a formar una isla de la personalidad. Y es igual en la vida real, ya que los logros que tenemos de pequeños hacen que nos comportemos de una determinada manera o que nos inclinemos a unas aficiones u otras: la primera vez que fuiste a un concierto, el primer premio de un concurso de dibujo, cuando te aplaudieron por hacer aquel discurso… La personalidad se forja por diversas vivencias con alta carga emocional.
La personalidad cambia conforme crecemos y vivimos, y eso lo reflejan muy bien en la película cuando las islas de la personalidad se derrumban. Al final, lo que podemos ver son más islas de la personalidad que son mezcla de las de la infancia, dando paso a una personalidad más seria y adulta.
Los rincones de la mente
Cuando Alegría y Tristeza se pierden en la mente de Riley, aparece la excusa perfecta para mostrar al espectador todos los entresijos de ese mundo metafórico tan maravilloso. Durante la película hacen un recorrido por las áreas más importantes de la mente humana, mostrando cada una de ellas de una forma cómica, pero muy inteligente.
El subconsciente
Dos policías guardan la puerta de la cárcel del subconsciente, donde están los elementos que no deberían salir a la luz, como tus mayores miedos o traumas que has tenido en la infancia: el payaso de aquella fiesta, las escaleras al sótano, la misteriosa casa donde vivía una persona mayor (que tú pensabas que era una bruja), etc.
La fábrica de sueños
Los sueños. Esos elementos del subconsciente de los que te he hablado suelen salir en los sueños. En la película, los sueños son elaborados por una compañía de cine, como si de una gran producción se tratase. Cada día se mezclan las vivencias de ese día con miedos, esperanzas e inquietudes. Los guionistas se encargan de hacer un cóctel con todos esos ingredientes y elaborar sueños de lo más disparatados y crear elementos únicos: unicornios de arcoiris, perros partidos por la mitad, etc.
El almacén de memoria a largo plazo
Cada noche, los recuerdos que se han vivido ese día pasan a la memoria a largo plazo. La memoria a largo plazo queda representada como un laberinto enorme de estanterías donde están almacenados los recuerdos. De ahí pueden volver a ser recordados o bien olvidados para siempre. De esto se encargan unos seres muy graciosos que se dedican a deshacerse de recuerdos grises que ya no son útiles, o que al menos ya no se usan.
Imaginalandia
En la película representan la imaginación como un lugar enorme donde todo es posible: un castillo infinito de naipes, una fábrica de amigos imaginarios, una ciudad de nubes, etc. Me gusta señalar que la imaginación no es algo puramente infantil, sino que es un área que todos tenemos en nuestra mente, aunque esté más o menos desarrollada. Todos tenemos imaginación y todos podemos usarla a nuestro favor.
La habitación del pensamiento abstracto
El pensamiento abstracto, entre otras, es una capacidad que se aprende conforme maduramos. Los niños muy pequeños no pueden comprender conceptos abstractos como la solidaridad, la tolerancia, el altruismo… Por eso en la película aparece un centro del pensamiento abstracto representado como una fábrica o un pequeño ordenador donde se fragmentan y alteran conceptos hasta volverlos más asequibles a la mente.
¿Qué emoción predomina en ti?
En determinadas partes de la película podemos ver qué pasa dentro de la mente de los padres de Riley. Es curioso que en la mente de la madre, el centro de mando lo preside Tristeza. Esto se puede interpretar como que en el rol de madre prima la preocupación, el interés, la cercanía, la escucha activa… Mientras que, en el centro de mando de la cabeza del padre, la mesa la preside Ira, porque se suele decir que los hombres son más de acción y más temperamentales.
Lo que nos supone cerrar una etapa en la vida
La película plantea esa etapa que todo niño padece cuando deja de ser un niño. Es una etapa complicada, llena de cambios a nivel corporal y mental, y hasta que Tristeza no se hace con el control de la situación (al final de la película) y Riley consigue abrirse emocionalmente y expresar lo que realmente siente, no puede cerrar la etapa infantil y madurar. Al dedicarle el tiempo necesario y el duelo necesario, Riley pasa de la infancia a la preadolescencia.
La infancia se caracteriza por tener emociones puras: o tristeza, o alegría, o miedo, o ira… No son emociones muy elaboradas. Sin embargo, conforme crecemos las emociones se entremezclan y eso queda muy bien representado en la película, ya que al principio los recuerdos son monocolor (dependiendo de la emoción que haya predominado en ese recuerdo, la esfera luminosa es amarilla, azul, verde, roja o morada). Al final de la película, las esferas luminosas que representan los recuerdos tienen distintos colores (amarillo azulado, verde rojizo, etcétera).
Porque no es lo mismo sentir alegría, tristeza, miedo, que sentir nostalgia, interés, estrés, paz… Los adultos la mayor parte del tiempo sentimos una mezcla de emociones y actuamos de acuerdo a lo que sentimos. Eso queda muy bien representado en la película y es algo que me gustaría que quedara claro: las emociones son útiles, todas ellas.
Conclusión y reflexión
No reprimas nunca una emoción. Hasta la tristeza tiene una función positiva y esencial en nuestra vida. Aprender a desarrollar la inteligencia emocional no es fácil ni rápido ya que en su mayor parte es involuntaria e inconsciente y las emociones están controladas por regiones del cerebro muy primitivas. Controlar las emociones no es algo que podamos aprender de la noche a la mañana, sino que es un viaje durante toda la vida.
Sinceramente, esta película es tan genial y profunda que se podrían escribir varios libros sobre ella. Pero esto es un blog, y se supone que esto debe ser un artículo. Creo que con más de 2500 palabras ya estoy abusando demasiado de la paciencia de mis lectores.
Dicho pues, como reflexión final: es una película imprescindible para cualquiera. Todo un cóctel de emociones, que te hace llorar desconsoladamente y reír a carcajadas. Sólo Pixar es capaz de jugar de esa manera con las emociones de los espectadores, ¡y esta vez lo hace utilizando, a su vez, emociones! Es sencillamente brillante. Una película muy disfrutable, visualmente magnífica, con personajes únicos y entrañables y unos momentos inolvidables y tremendamente emotivos.
¿Y a ti? ¿Qué te ha parecido Inside Out (Del Revés)? ¿Te ha gustado? ¿Has sido capaz de relacionar todos los detalles con el funcionamiento de nuestro cerebro? Déjame tu opinión sobre la película en los comentarios. Y si quieres añadir cualquier cosa al artículo, todo aporte será bien recibido.