Artículo reeditado y actualizado a 24 de Octubre de 2015.
4 consejos para ampliar tu vocabulario
Para un escritor, las palabras son su herramienta de trabajo. Conocer más o menos palabras puede compararse con el hecho de que un carpintero tenga más o menos instrumentos para trabajar la madera. Cuanto mayor y más surtido sea el instrumental, mayor será la precisión respecto al resultado final que se busca. Por ello, para que mejores poco a poco y puedas ampliar tu vocabulario, aquí te doy algunos consejos bastante eficaces.
1. Apunta las palabras desconocidas con las que te vayas topando
Muchas veces no basta con buscar su definición, al tiempo se te olvida. Lo idóneo es que tengas un compendio con todas las palabras desconocidas que se han cruzado en tu camino. Apúntalas sin más, sin definición. De manera que cuando vayas a escribir y le eches un ojo a tu lista de palabras podrás comprobar cuáles has memorizado y cuáles no. Las que no, pues simplemente vuelve a buscar el significado. De este modo y con un poco de paciencia, al final habrás memorizado el significado de todas las palabras de tu lista y tu vocabulario será un poquito más amplio.
2. Leer, leer y leer
Esto ya lo habrás oído mil veces: la mejor forma de mejorar el vocabulario es leyendo. Esto es cierto siempre y cuando recurramos a una lectura cargada con un vocabulario complejo. Si leemos un libro enfocado a adolescentes, dudo mucho que te topes con más de dos palabras que no te suenen. Lo ideal es recurrir a novelas históricas, ya que muchas de ellas utilizan palabras en desuso. También ayuda leer libros de temas específicos, donde aprenderás un montón de palabras sobre el tema en cuestión. Por ejemplo, una novela de piratas podría enseñarte cuales son las partes de un barco o qué expresiones solían utilizar los marineros del Siglo XVIII.
3. Aprende por lo menos tres palabras al día
Si te limitas a apuntar las palabras desconocidas que encuentras de paso, no estás marcando un ritmo de aprendizaje. Si estás un mes entero sin coger un libro y sin propiciar esos encuentros con nuevas palabras, será un mes entero que no has aprendido nada de vocabulario. Lo ideal es que te obligues a ti mismo a aprender un mínimo de tres palabras diarias. En el siguiente punto descubrirás una forma muy sencilla de hacerlo, sin que tengas que estar con el diccionario a la desesperada buscando palabras. Pero la idea es que, de un modo u otro, aprendas tres palabras al día.
4. Programas y Aplicaciones
Vivimos en la era de la tecnología y de las aplicaciones móviles. ¿Por qué no aprovecharse de eso? Existen multitud de aplicaciones y programas para ordenador (desde diccionarios de sinónimos y antónimos, hasta listados de palabras infrecuentes). Pero en especial yo voy a recomendar una App en concreto: se llama Una Palabra. Cada día aparece una palabra rara distinta, con su respectiva definición. Y lo bueno que tiene esta aplicación respecto a otras, es que es casi imposible que conozcas las palabras que aparecen en ella. Son extremadamente raras y es justo lo que necesitas para alimentar aún más tu vocabulario. Descarga la App, revísala todos los días y recuerda la palabra de los dos días anteriores. Así, cuando quieras darte cuenta, habrás aprendido un montón de palabras nuevas.
Anímate y empieza desde ya a mejorar tu vocabulario. Pero sé paciente, porque pasará mucho tiempo hasta que las nuevas palabras se incluyan en tu vocabulario hasta tal punto de que salgan solas. Mientras tanto, sigue aprendiendo cada día algo nuevo.